lunes, 31 de agosto de 2009

Recordando a "La Maravilla Elástica": 31 años del fallecimiento de Ángel Bosio

Ángel Bosio, el arquero más grande que ha dado Talleres, y uno de los mejores guardametas de la historia del fútbol argentino, falleció un 31 de Agosto de 1978.
Los hacedores del blog, simplemente, queríamos recordar a uno de los mayores ídolos que tenemos los hinchas de Talleres, el día en que se cumplen treinta y un años de su desaparición física.



La siguiente semblanza, la publicó el diario Crónica el 1 de Septiembre de 1978.

Más dolor; Murió Bosio, “La Maravilla Elástica”

Ayer , a la edad de 73 años, dejó de existir Ángel Bosio, extraordinario arquero de Talleres y River Plate.
Su deceso se produjo en una clínica de Banfield, donde se encontraba internado desde el miércoles a causa de un infarto agudo de miocardio. Sus restos son velados en la casa Lombardo de Lanús, y serán sepultados hoy por la tarde.

Señor del arco

Su gran agilidad y sus buenos reflejos, hicieron que se lo conociese como “La Maravilla Elástica”. Bosio se inició en el club América de Banfield, donde debutó a los 15 años. En 1922 se incorporó a Talleres, y años más tarde tuvo un paso fugaz por Progresista, y luego por Argentino del Sud.

Talleres


En 1924, volvió a su querido Talleres, donde hallaría la consagración. Fue internacional en 1924, pero no pudo ser titular, dado que delante suyo tenía otro monstruo: Américo Tesorieri.
Jugó en los sudamericanos de 1927 y 1929, teniendo siempre destacada actuación. También estuvo presente en el mundial de 1930, y en los juegos olímpicos de 1928 en Ámsterdam.

Como todos los grandes, Ángel Bosio tiene su vida llena de anécdotas. Quizás la más conocida es aquella sucedida en 1928, en ocasión de un cotejo por la Copa Lipton con Uruguay en Montevideo. En esa oportunidad, Bosio sacó un tiro espectacular del oriental Sacco. El delantero llegó hasta las barbas del argentino y puso la pelota justo en el otro palo del arquero.




¡Que atajada!

Increíblemente y ante la sorpresa general, Bosio voló de palo a palo y sacó al corner el balón. Enmudeció el Parque Central ante esa muestra de destreza y habilidad de parte del gran golero argentino.
Ángel Bosio llegó a River en 1932, y con los millonarios obtuvo el campeonato de ese año, como el de 1936. Pero poco después, llegaría la hora de darle paso a otros.

Lesionado

Una vieja lesión en su rodilla izquierda, obligó al gran ángel a dejar su pasión. Una pasión cobijada por tres palos y realzada por sus excelentes aptitudes, Bosio dejó el fútbol pero siguió atajando los recuerdos de una vida llena de historias.
Hace muy pocos días se fue el “Charro” Moreno, ahora “La Maravilla Elástica”, dos glorias del fútbol argentino tomaron el mismo rumbo. Triste, pero muy real. Al fin y al cabo, las estrellas están en el cielo.



Le agradecemos la cesión de la nota y la tapa del diario Crónica, al amigo Néstor Bova, que colaboró desinteresadamente cediendo las imágenes. Muchas gracias Néstor.

1 comentario:

PABLO SOLO ALMIRANTE dijo...

nuevo blog mirasol

www.soloalmirante.blogspot.com

saludos